La
mayoría de los proyectos de mejora de la eficiencia operacional se basan
fundamentalmente en programas de control de las pérdidas de producción. Uno de los principales desafios de estos programas es identificar los orígenes y la volumetría de las perdidas que permitan generar estrategias y planes
de acción para cerrar las brechas entre la máxima capacidad de producción
instalada y la actual.
Generalmente
los orígenes de una pérdida de producción estan en: las paradas de planta
(planificada o no), las restricciones o cuellos de botella en el proceso y las ineficiencias
operacionales. Al identificar y combinar el origen de las perdidas y su
volumetría podemos jerarquizarlas y establecer prioridades que nos permitan evaluar
eficientemente sus causas. Asi mismo al identificar el origen, el volumen y la causa de
una perdida podemos determinar el mejor plan de acción para remediarla y evitar nuevamente su
ocurrencia.
Un
elemento esencial en este proceso es el reporte de pérdidas, el cual, tiene el
importantísimo objetivo de capturar toda la información que permita el análisis
de las mismas.
Los
reportes de perdidas generalmente son elaborados por el personal de operaciones
de producción y es lógico que así sea, ya que, ellos son los responsables
directo de hacer seguimiento y reportar los niveles de producción de las
plantas. Lo más común es que encontremos la información de las perdidas dentro
de los reportes diarios de producción, sin embargo, no es extraño hoy día,
conseguir otras herramientas o software especializados en la captura de información
de las pérdidas de producción.
En
todo caso un reporte de pérdida debe ser lo más simple y amigable posible, sin
sacrificar ningún dato o pieza de información que posteriormente pueda ser
utilizado en el análisis de las causas o permita la retroalimentación entre operaciones
de producción y otras áreas de la empresa (Mantenimiento, Ingeniería, Finanzas etc.),
debe contener como mínimo la siguiente información sobre la pérdida:
1. Número
de registro o identificación
2. Fecha
y Hora
3. Tipo
(Planificada o no planificada)
4. Ubicación
– Planta afectada
5. Cantidad
estimada de la perdida
6. Causa
Probable
7. Acción
Correctiva acordada
8. Nombre
de la persona que hace el reporte
Si
bien es cierto que el personal de operaciones de producción son los
responsables de generar los reportes de perdidas, también es cierto que al analizar
sus causas son grupos multi-funcional y multi-departamental los que llevan a
cabo esta acción, es entonces cuando empiezan a surgir preguntas que requieren respuestas en base a otro tipo de información y datos que en la mayoria de los casos no están en el contenido de dicho reporte.
Por
ejemplo, cuando estamos frente a perdidas por paradas no programadas causadas por fallas de equipos, esto seguramente nos conducirá a un Análisis Causa Raíz de la Falla (ACRF), lo que presume y requiere recolectar una gran cantidad de datos e
información que no siempre está presente en los reportes de perdidas elaborados
por operaciones de producción.
Para resolver esto, una práctica que he
implementado con bastante éxito ha sido vincular el reporte de perdidas con la
Orden de Trabajo (ODT) de mantenimiento, esto permite, a demás de obtener más
información sobre las fallas y sus acciones correctivas, dejar un registro
histórico, no solo de las perdidas, sino también de las causas de fallas y de las
consecuencias de estas vinculada con los equipos, esto posibilita tambien reevaluar los niveles de criticidad de los equipos involucrados y por consecuencia
ajustar las estrategias de mantenimiento.
Una
vez analizada de forma integral una pérdida es importante que ingrese a una
base de datos donde esté debidamente ordenada por categorías, tipo y causa,
esto permitirá hacer evaluaciones periódicas de los procesos, identificar acciones preventivas y compartir información con
otras planta similares con el fin de reducir o eliminar las causas más comunes
de pérdidas. Generalmente este tipo de registro o bases de datos son mandatorios por las gerencias corporativas.
El
seguimiento a la ejecución de las acciones correctiva es otro aspecto importante
que atender, para lograr esto las bases de datos relacionas con las perdidas de produccion deben estar enlazadas con los procesos
de planificación y programación de la planta para así garantizar los recursos
para la ejecución exitosa de estas acciones.
Finalmente
el círculo se cerrara con reuniones periódicas para hacer seguimiento a los
indicadores que miden la eficiencia operacional de la planta, estas reuniones serán
multi-departamental y multi-funcional y su principal objetivo será promover la transferencia
del conocimiento de las causas de las perdidas y proveer los recursos necesarios
para la capacitación del personal, compra de nuevas herramientas y otros recursos para evitar
las perdidas recurrentes, así como también revisar los roles y responsabilidades de las posiciones clave, si fuese necesario.